Extracto del documental Tarzan: Silver Screen King of the Jungle (2004)
Seria fabuloso que el chimpancé que interpretó a Chita (nombre castellanizado) en la serie de largometrajes sobre la figura del heroico Tarzán fuera uno y sólo uno, pero no es así, al personaje lo interpretaron numerosos chimpancés. Es bueno que se recuerde al primero, Jiggs, que participó en las dos primeras películas en que Johnny Weismuller hizo de Tarzán: Tarzán (1932) y Tarzán y su compañera (1934), y también en otras de esa década con distintos actores representando al rey de la selva. Pues bien, este buen chimpancé murió de pulmonía en 1938. En cada película el personaje de Chita podía ser interpretado por varios chimpancés, según la habilidad de cada uno para realizar ciertas acciones. El talento de este personaje se debe, pues, a sus múltiples intérpretes. Hay una polémica sobre la verdadera edad del primate llamado Cheeta que comparte estos días algunas portadas de periódicos anunciándose en ellos su muerte. Para el periodista R. D. Rosen el simio no tenía 79 años, no era el más longevo del mundo ni participó en la serie Tarzán, tras la muerte del original Jiggs en 1938, sino que nació en 1960 y ha muerto a los 51 años de edad. De este articulista es el siguiente escrito:
Otros artículos que podéis consultar para saber más sobre este asunto son (para el chimpancé Jiggs y para el personaje Cheeta, respectivamente):
Sabemos que Hollywood es una fábrica de sueños, que en las novelas de Edgar Rice Burroughs Tarzán no tenía una compañera chimpancé, sino una mona pequeña, sí, un primate con rabo, que se llamaba Nkima (ésto en sus últimas aventuras), y que a la simpática compañera del heroico personaje la interpretaron diferentes simios, pero parece que tenemos la necesidad de concentrar nuestro cariño en una sola personalidad, permítaseme este trato a un simio, y por eso los periódicos hablan estos días de la muerte de Chita, coprotagonista de muchas de las películas de Tarzán de los monos. En cualquier caso, estos chimpancés son estupendos actores cómicos que nos hacen reír con cada una de sus travesuras, sólo espero que el trato que les dieron sus entrenadores fuera el correcto y que disfrutaran de cierta libertad a pesar de su artístico cautiverio.
Descanse en paz esta última Cheeta, que ha muerto el 24 de diciembre de 2011 a causa de una insuficiencia renal.
Por último, para despedirnos con una sonrisa en la boca, veamos juntos este extracto de la película El triunfo de Tarzán (1943):
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