Kristy McNichol es una actriz con un enorme talento natural para la interpretación, a todas luces posee una sensibilidad ideal para cualquier director de cine con capacidades −en este caso, trabajó para el director de cine independiente Ronald F. Maxwell, autor de un escaso número de filmes−. Kristy es un prodigio que además se convirtió en una popular estrella juvenil a mediados de los años 70, con todas las desventajas que tal cosa acarrea para los que tienen ese tipo de fortuna. Por ejemplo, en 1992 se le diagnosticó un trastorno bipolar, lo que antes conocíamos como psicosis maniaco-depresiva, que, en general, significa que el individuo que la padece ve alterado su ánimo entre estados de alegría exagerada (manía) y depresión profunda (tristeza). Hoy en día, la actriz parece recuperada de ese episodio y desarrolla una vida normal con su compañera y amor, Martie Allen. Pero lo interesante de ella es que, tras unos años de una actividad intensa en el cine, decidió abandonar la carrera de actriz e interpretar su propio papel en la vida, como ella misma declaró en 2001. Ya he explicado en esta página dedicada al cine que el actor no siente, en realidad, provecho de su vida ficticia (la que desarrolla en sus papeles), está desorientado, todos quieren que sea como su personaje, pero él tiene su propio guión vital, su propia soledad y su propio destino.
Este largometraje desarrolla muy bien las emociones y sentimientos que tenemos durante la adolescencia, la idea de convertirse en mujer tras hacer el amor (tener sexo) y lo difícil de la entrega del cuerpo y las ideas a la pareja, el amor, cosa descuidada por filósofos y médicos y materia eterna para poetas y soñadores. Disfrutemos, pues, de los sentimientos de adolescencia que nacen en Little darlings (1980).
Quisiera verla, la encuentro en torrent pero solamente en inglés. La quiero subtitulada porque lamentablemente no sé el idioma original
ResponderEliminarHola anónimo. Tampoco yo la he conseguido en castellano. Lo curioso es que cuando la han dado por televisión ha reunido a mucha gente alrededor del aparato, sigue siendo un largometraje entrañable sobre la adolescencia y el amor.
ResponderEliminarGracias por participar.