Reseña crítica del largometraje "Hostiles" (2017)

 

 

Hostiles (2017). Un western revisionista de dos horas, que se cuece a fuego lento.

América, en todo su conjunto, es una tierra construida, desde sus inicios, con violencia, terror, y lo que supuso el exterminio de millones de nativos.

 En los EE.UU., el Séptimo de Caballería, comandado por el general Custer, acabó con la vida de mujeres y niños, masacrados por sus winchesters y revólveres; el hombre blanco no tuvo piedad con las tribus indias, guerreras y también pacíficas. sioux, cheyennes, apaches, comanches, arapahoes, cherokees, lakotas, todos…

 El director de esta cinta es Scott Cooper, cuyo buen hacer en el arte cinematográfico reconocemos en los títulos:

 Out of the Furnace (2013), que en España recibió el absurdo título de La ley del más fuerte. Un crudo drama sobre dos hermanos que afrontan un duro destino en un mundo violento, justo cuando la mala fortuna se cruza en sus vidas. Una historia recomendable y digna de un análisis psicológico, ¿vengarías tú el asesinato de un ser querido?

 Crazy Heart (2009), que en España conocemos como Corazón rebelde (2009). El actor Jeff Bridges ganó varios premios por su interpretación de un músico de country amargado y alcoholizado que encuentra su redención a través de un romance.

Pero, ¿qué cuenta el largometraje Hostiles? La historia es sencilla, durante el año 1892, un grupo de soldados del ejército de caballería del ejército de los EE.UU. tiene que trasladar a un viejo guerrero indio, de la tribu guerrera cheyenne, a través de un territorio hostil en el que tanto los llamados blancos como los pieles rojas pueden ser sus enemigos. Con ellos van varios familiares del jefe indio, una pareja adulta, una joven y un niño. Este guerrero se llama Halcón Amarillo, y su ferocidad en combate era temida por la soldadesca estadounidense. Ahora debe ser escoltado hasta Montana (al norte de los EE.UU.) por un capitán del ejército que hasta hace unos pocos años era su enemigo en combate.

 Esta cinta es una producción sin mucho presupuesto, que tuvo una distribución limitada. El actor consagrado Christian Bale aceptó trabajar en ella atraído por la historia y el personaje que interpreta aquí; él es un actor que busca desafíos, incluso en una película con la que no cobra un sueldo de acuerdo a su estatus de estrella cinematográfica.

 Una de las cosas que más me gusta de esta historia es el absoluto respeto que tiene el capitán del ejército (interpretado por Christian Bale) hacia la mujer cuya familia ha sido exterminada por un grupo de comanches, su marido, sus dos hijas pequeñas y un bebé, todos ellos masacrados delante de sus aterrados ojos. El capitán, curtido en decenas de sangrientas batallas, muestra un respeto completo por cualquier acción que realice esa mujer, incluso algunas llevadas por la locura temporal y la crisis nerviosa por haber perdido a su familia de esa manera. El capitán está ahí en todo momento, respetuoso, silencioso, atendiéndola en todo lo que puede. Magistral.

 La línea del horizonte en un western, la norma del maestro John Ford. El horizonte no debe estar en el centro de la pantalla, o está encima o debajo, nunca en el centro. Esto lo podemos ver a lo largo de todos los planos generales de este largometraje. Maravillosa fotografía, tanto de día como de noche. He de nombrar, como curiosidad, las gigantescas lámparas que cuelgan para filmar una escena de noche, en un acampando.

 El símbolo de un soldado que comprendió el error del genocidio de las tribus indias. Tarde o temprano, la violencia pasa factura en las almas de personas con un mínimo de sensibilidad. Los tormentos de un soldado (norteamericano en este caso), ya sea en el antiguo y salvaje oeste como en el Vietnam moderno, son terribles para el espíritu, nadie podría soportar un dolor así sin que su psique quede alterada. Descanse en paz el alma del sargento mayor Thomas Metz, personaje de ficción interpretado magistralmente por Rory Cochrane en la excelente película Hostiles, 2017. Fue un buen amigo y “hermano de armas” para el capitán Joseph J. Blocker (al que da vida Christian Bale), un guerrero que consiguió comprender a los nativos indios de América y sentir el error de haberles quitado sus tierras, su honor y su alma.

 Momento crucial. Spoiler alert. El niño indio que sobrevive al final y queda en manos de la mujer blanca rubia pudiera simbolizar a la raza india, en su conjunto, que lo ha perdido todo, y queda, como un alma perdida, en manos de una Norteamérica (la nación), simbolizada, tal vez, por esa mujer blanca, que también ha perdido a su familia, victima de la violencia de una tribu india.

 La dificultad del papel dramático de una mujer que ha perdido a su familia de una forma bárbara, terrible, que no podemos comprender en absoluto. Hay una delgada línea que puede separar una interpretación tan compleja de caer en algo que pudiera considerarse ridículo; la elegante actriz Rosamund Pike (de belleza clásica) consigue superar esa prueba de una forma sobresaliente, manteniendo en alto la carga de la película, apoyada por la soberbia actuación de Christian Bale y el resto del reparto. 

 Las interpretaciones están justo en su punto, incluso la de actores que apenas tienen una línea de diálogo están siempre dentro de su papel, por ejemplo, Adam Beach, que aquí da vida a Halcón Negro. Aunque me hubiera gustado escuchar más las voces del jefe guerrero Halcón Amarillo (Wes Studi) y sus familiares, saber qué sienten sobre el dolor de algún soldado arrepentido por las acciones de su raza contra el indígena original del continente americano. Los intérpretes principales son: Christian Bale, Rosamund Pike, Wes Studi, Ben Foster, Stephen Lang, Jesse Plemons, Rory Cochrane, Adam Beach, Q'orianka Kilcher, y Jonathan Majors.

Reseña en vídeo del largometraje Hostiles (2017)