Busca obras, autores, actores y términos en este cuaderno:

jueves, 1 de diciembre de 2011

Warcraft no satisface más que una pasión

Captura de pantalla del juego World of Warcraft (2004-)

En los últimos años, los humanos abandonamos los libros, rechazamos al teatro, dejamos de lado al cine. Sin embargo, desde tiempo inmemorial nos ha gustado reunirnos para escuchar historias o ver sus representaciones. Puede que sean las academias modernas, que llevan varios siglos ya con las mismas reglas, las que hacen que muchas personas desprecien al teatro y los libros. ¿No son odiosas las calificaciones, la falta de diálogo y la negación de los sentimientos...? ¿No eran más productivas las academias de los antiguos griegos?
Me gustaría compartir con ustedes esta historia de la obra Hamlet:
“(En pasados siglos) No era rara la publicación pirata de dramas: alguien dotado de una memoria especialmente buena, dentro de que en aquella época todo el mundo tenía mejor retentiva verbal que hoy día, asistía unas pocas veces a la representación de un drama y luego se iba a su casa y allí lo transcribía de memoria, no sin errores y malentendidos. En 1604 se publica otro in-quarto del texto bastante decente, que sirve de base a otras tres ediciones sueltas que hay hasta 1637…”
Este escrito de arriba pertenece a José María Valverde. RBA Editores. Shakespeare. Tragedias.
Bien, había un Hamlet, hoy en día perdido, antes del que se recuerda de Shakespeare. Las obras, cuando gozaban de éxito, se retocaban, se seleccionaban. El público admiraba en ellas las pasiones que representaban, los celos de Ohtello, el amor de Romeo y Julieta, el deseo de venganza de Hamlet… La pregunta es la siguiente: ¿Por qué los videojuegos han conseguido desplazar a las películas, a los libros, al teatro? Desde un principio, los videojuegos han convertido al jugador en un soldado. Primero, uno que rechazaba la invasión marciana; luego, un come bolas que había de cumplir misiones de forma cada vez más rápida; en nuestros días, en World of Warcraft es un soldado que lleva la bandera a un sitio específico, subiendo de ese modo de niveles; cumple así su deseo de superar a los demás. Bien, ya en Rojo y Negro, de Stendhal, eran esas las aspiraciones de Julien, escalar en su categoría social. Lo que se pierde el jugador de estos modernos entretenimientos son todas las pasiones de un personaje como Julien, todo su mundo interior, que en mucho coincide con el de cualquier joven de nuestro siglo y los venideros. Las descripciones de las almas de aquellas mujeres de Rojo y Negro son tan validas (1) hoy como en 1830. Los hombres no hemos cambiado desde los tiempos de El príncipe (1513), de Maquiavelo; somos esclavos de los mismos deseos. La recomendación de un lector creo que será siempre la de: conoce tu alma a través de la de los demás, esas están en los libros.
La única pasión que satisface el popular juego World of Warcraft es la de conquista, la de soldado que supera a los demás. Aquella misma que tenían los que idolatraban a Napoleón y que, llevados por su juventud, se arrojaron a conquistar Europa bajo las órdenes de aquel general que pretendiera unificar y gobernar el continente. ¿Qué hay de las demás pasiones que los videojuegos dejan insatisfechas? El cine, el teatro, los libros continúan hablando de ellas. No descuides tu alma de explorador, busca en los libros, en el teatro y en los largometrajes aquello que sientes muy adentro y que deseas compartir con los demás, tus anhelos, tus pesares...

Captura de pantalla del juego Invasores espaciales (1978)
Los videojuegos nos llevan a otra realidad, llamada virtual, donde podemos satisfacer deseos como los de enfrentarnos y superar a los demás. No obstante, el alma humana demanda el cumplimiento de otras pulsiones, como la de conocer nuestro interior, llevar a cabo las siempre complejas relaciones con los demás, amar...

Captura de pantalla del juego Comecocos (1980)
El Comecocos sube de niveles, arriesgando más en menos tiempo. Sus enemigos le superan en rapidez. Las ansias de competitividad, tan arraigadas en el ser humano, quedan sosegadas por un tiempo.

Trailer oficial de la película Tron (1982)
El largometraje Tron (1982) inicia una era de cine virtual, un viaje a un mundo inventado por el hombre, donde no existen árboles ni pájaros que en ellos aniden. La belleza de las luces artificiales nos asombra. El helicóptero aterrizando en la noche en lo alto de un rascacielos, la fuente de energía de la que beben los programas y el programador, el horizonte artificial..., todo forma parte de un mundo limpio, sin polvo. La cinta goza de la inquietante y sugerente música de Wendy Carlos, un creador nacido en 1939 que usa sintetizadores eléctricos, analógicos y digitales, para llevarnos a un mundo nuevo. El universo Tron no fue bien entendido a principio de los 80, la película nunca ha gozado de excesiva popularidad, sólo con los años se ha ganado un sitio entre las historias de culto del séptimo arte. Seas o no jugador de videojuegos, deberías intentar ver este filme, explorar tus sentimientos al visionar ese fantástico espacio de luces y plasticidad infinitas.
Nota (1) Valida y válida, es curioso como los dos adjetivos dan sentido a la frase. Es que el lenguaje es un lego apasionante, un juego con el que entretenerse, equivocarse, aprender… No debemos sentirnos humillados por cometer errores al escribir, hasta Stendhal sintió en vida el bochorno y la burla por cometer algún error ortográfico, el lenguaje es muy complicado, y exige un continuo estudio. ¿Quién no ha tropezado alguna vez al caminar? Pero no por eso dejamos de caminar.

_____________________________________________________________

Zona de anuncios



No hay comentarios:

Publicar un comentario

Hola. Recuerda que todos podemos tener una opinión distinta. No recurras al insulto en tus comentarios o serán eliminados sin tenerlos en cuenta. Procura explicar tu punto de vista sin caer en la descalificación de los que no piensan como tú. Tenemos un cerebro para discurrir y trabajar con las ideas, somos algo más que puños y dientes. Gracias.

Recomiendo:



Aprende Inglés con Ente Nivola
Visita mi cuaderno para estudiar inglés en el Bachillerato:
Te ayudará a sacar mejores notas en la asignatura de inglés

Algunas reseñas literarias:

La Odisea, atribuida a Homero:

Vamos a estudiar hoy una de las obras literarias históricamente preferidas por muchos: La Odisea, atribuida convencionalmente a Homero. Se trata de un gran poema épico griego que se estima tiene ya unos 2700 años de antigüedad.


Edipo Rey, de Sófocles:

Esquilo (siglos VI y V a.C.), Sófocles y Eurípides (los dos, siglo V a.C.) son tres de los grandes en la escena teatral de la Antigua Grecia.


Satiricón, de Petronio:

Hoy vamos a estudiar juntos un poco de la que se tiene por muchos como primera novela moderna de Occidente: Satiricón.


Cantar de Mío Cid:

El gran poema épico de los castellanos tiene muchos estudios a sus espaldas, muchos tratados y ensayos, muchos chavales lo han estudiado en las escuelas.


Divina Comedia, de Dante:

El gran poema que hoy estudiamos está escrito en tercetos endecasílabos. Su resumen parece sencillo: cuenta la epopeya del alma humana, su viaje a través del Infierno y del Purgatorio, desde donde accederá a la contemplación del Todopoderoso.


El paraíso perdido, de John Milton:

Voy a estudiar hoy algo del poema narrativo El paraíso perdido (1667), del escritor británico John Milton, y ustedes, si me lo permiten, están invitados.


Estas son las entradas más populares de mi cuaderno:

Razones por las que evitar los anuncios de algunas empresas de la Red:
1 - Algunos insultan a la inteligencia del lector. Me refiero a los que dicen que has ganado un premio por ser el visitante número 1.000.000. Triste, pero todavía hay publicistas que usan este tipo de ganchos.
2 - Ralentizan excesivamente la carga de un blog.
3 - Pagan a razón de unos pocos céntimos por miles de visitas. Todo trabajo debe ser remunerado justamente. Es mi deseo que, en el futuro, cualquiera que quiera anunciarse en un cuaderno de la Red deba pagar una cantidad justa a los creadores. Este abuso que existe hoy debería ser rechazado con rotundidad.

Condiciones de uso:

No me hago responsable de los comentarios y opiniones emitidos por los usuarios acerca de los artículos de este, mi cuaderno. Cada uno de los usuarios será responsable por tales comentarios u opiniones que envíe a alguno de los artículos de mi cuaderno. Si consideras que algún artículo, comentario u opinión de este cuaderno pudiera resultar ofensivo en algún modo, por favor, ponte en contacto conmigo: eltrucomasdificil@gmail.com
Gracias por participar.